Contratiempos referentes a la salud pueden surgir durante la peregrinación, el consumo de alimentos en mal estado, agua contaminada, y otros pueden representar un peligro para las personas..
El
calor junto con los fuertes rayos del sol influyen en el desgaste físico de los
peregrinantes que van a Caacupé, como también, en la calidad de los alimentos,
es por ese motivo que se solicita tener en cuenta ciertos criterios y los
recaudos para prevenir la deshidratación y otros malestares relacionados con la
seguridad alimentaria. Las
principales medidas y las más difundidas, año tras año que pueden realizar los
peregrinantes para evitar enfermedades transmitidas por el agua o los alimentos
son: ·
Lavarse
frecuentemente las manos, en especial antes de las comidas y luego de ir al
baño. ·
Beber solamente agua
segura (envasada), tener cuidado con el consumo de hielo. ·
Consumir alimentos
bien cocidos y preferentemente calientes, tener cuidado con los alimentos
expuestos al sol. ·
Beber importantes
cantidades de agua. ·
ARROJAR las basuras en los depósitos establecidos para su
fin.
En
este último punto, cada año miles de personas llegan hasta la villa serrana y a
su paso dejan toneladas de basura no depuestas en los contenedores sino en las
calles, llenando las avenidas de bolsas, botellas de plásticos, alimentos,
yerbas, etc., que ayudan a la proliferación de
insectos dañinos para la salud.