Chacarita registra 79% de viviendas con criaderos de mosquitos

Del total de casas visitadas en la víspera, en el Barrio Ricardo Brugada, solo el 21% cumple con la eliminación y mantenimiento de criaderos.



De acuerdo con el informe elevado por el SENEPA, un total de 482 predios fueron inspeccionados ayer martes en el Barrio Ricardo Brugada de la Capital. De este total de predios, 382 (79%) presentaron criaderos de mosquitos, lo que repercutió en la detección de 2.039 recipientes servibles e inservibles que sirven de reservorio para la proliferación de mosquitos.

669 criaderos fueron eliminados y 1.370 fueron tratados de este total de 2.039 criaderos encontrados.

Cabe mencionar que 296 predios no pudieron ser inspeccionados debido a que 192 de estas casas estaban cerradas, 44 estaban deshabitadas y 62 casas directamente se negaron a que los seneperos ingresen a hacer su trabajo.

El control domiciliario, tanto en el interior de la casa, como en el patio, debe ser permanente para evitar convivir con criaderos de mosquitos, que son fuentes de enfermedades como el Dengue. En ese contexto, la cartera sanitaria recuerda algunos objetos que pueden convertirse en fuente de cría de larvas, a fin de que sean identificados y erradicados del hogar.

Criaderos en el interior de la casa (intradomiciliarios)

Floreros, portamacetas, jarrones, botellas retornables, desagüe de refrigeradores, inodoros que no se utilizan.

Criaderos en el patio (peridomiciliarios)

Recipientes descartables, frascos, botellas, macetas, latas, neumáticos, tanques, tambores, toneles, tanques elevados, plantas de hoja ancha (bromelias, banano), canaletas de desagüe, plantas acuáticas, vidrios en la pared, ladrillos huecos, bloques, huecos en paredes (bloques).

Artificiales inservibles

Cubiertas a la intemperie, baterías viejas, carrocerías y piezas de automotores, baterías, latas, botellas o frascos de diverso tipo, juguetes viejos a la intemperie, baldes, tarros, materiales de construcción, cáscaras de huevo, coco u otras, botas de goma en desuso.

Para la identificación y eliminación de estos potenciales criaderos, se necesita invertir 10 minutos diarios en la revisión de la vivienda.