Paraguay tiene el mejor sistema de conservación y refrigeración de vacunas de la Región

Controles de la red de frío, desde el origen hasta su arribo al país, son rigurosos.
Los distintos servicios a nivel país cuentan con refrigeradores especiales para vacunas, que soportan la falta de energía eléctrica hasta por 72 horas.


El Ministerio de Salud cuenta con estrictos controles de la red de frío, esto implica que las vacunas ni otros biológicos no son ingresados sin dicho control seriado.

Las vacunas que llegan al país tienen monitores impregnados con los que se puede verificar la oscilación de la temperatura desde el origen hasta la llegada. Al retirarlas de la Aduana, la misma cadena de frío es seguida al igual que en los procesos de distribución a los servicio de todo el país.

Las gestiones y el control afianzado en los últimos años del Programa Ampliado de Inmunizaciones, dependiente del Ministerio de Salud Pública, han permitido la optimización del uso de vacunas en todo el país, como por ejemplo, pérdidas que superaban el 80% hallado a finales del 2012. En la actualidad, las mismas se encuentran en rangos permitidos por la OPS y que oscilan entre el 5% y el 30% para frascos multidosis y cero pérdidas para vacunas mono dosis.

En el 2016, de las más de 6 millones de dosis de vacunas Sabin declaradas como pérdidas a nivel mundial durante el proceso de cambio o Switch, en el Paraguay no fueron utilizadas solamente 100 dosis, con un costo total de 14 dólares. Comparado con las grandes pérdidas halladas a finales del 2012, se muestra una disminución del 99%.

Refrigeradores especiales preservan vacunas ante corte de energía eléctrica

Durante el 2016, el Programa Ampliado de Inmunizaciones invirtió 900% más en la compra de equipos de red de frío para el mantenimiento de las vacunas. Aparte de lograr un incremento de más de 120% de capacidad de toda la red de frío a nivel nacional para vacunas, en comparación a lo encontrado al inicio de la actual gestión del gobierno nacional, mejoró la calidad de los equipos, ya que se trata de refrigeradores especiales para vacunas, con una inversión de 1.692.000.000 de guaraníes.

Los mismos están preparados para soportar la falta de energía eléctrica hasta por 72 horas, pues cuentan con un termómetro solar y una batería que permite mantener las vacunas a una temperatura de entre 2 y 8 grados.

Los refrigeradores -que están debidamente inventariados y patrimoniados, fueron distribuidos a localidades más aisladas y en donde no se cuenta con generadores, de tal manera a garantizar la cadena de frío de los biológicos en zonas vulnerables.

Otro paso importante fue el fortalecimiento y equipamiento del Centro Nacional de Vacunas, mediante la refrigeración central incorporada y la compra de 3 nuevas cámaras de vacunas en pleno proceso actual de ejecución.