Un trasplante hepático y dos renales se logró hasta el momento, tras donación.Los beneficiarios son una mujer de 29 años que requería de un hígado, un hombre de 59 años y otro de 64 que se encontraban a la espera de un riñón.
Entendieron que, después de la muerte, también podemos dar vida. Este es el caso de una familia, que a pesar del dolor por la pérdida de un ser querido, resolvió dar un paso decisivo e importante, donar los órganos de quien partió de este mundo a la edad de 56 años. Este ejemplo de humanidad y altruismo posibilitó recientemente el trasplante de órganos a tres personas que se encontraban a la espera de un donante para seguir viviendo y mejorar su calidad vida. Una mujer de 29 años, con hepatitis autoinmune en etapa cirrótica, fue sometida a un trasplante hepático en el hospital de Clínicas. Otro beneficiado con la donación de órganos fue un adulto mayor, de 64 años, que requería de un trasplante de riñón. La intervención se llevó a cabo en el hospital del IPS – Central. Y, en el transcurso de hoy, se prevé la intervención de un hombre de 59 años, que será sometido a trasplante renal en el hospital de Clínicas. Todos se encontraban en lista de espera desde hace 6 meses. En tanto que, las córneas extraídas de la donante por parte de la Fundación Visión se encuentran a la espera para su implantación. El Dr. Gustavo Melgarejo, director del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), agradeció al equipo médico multidisciplinario que acompañó esta loable labor y a la Fuerza Aérea Paraguaya, por el apoyo indispensable para el éxito del operativo.
