¿Cuánto y cómo usa tu hijo la tecnología?

Está demostrado que la estimulación que recibe un cerebro en desarrollo, provocada por la sobreexposición a celulares, Internet, iPads y TV, está asociada con un déficit de atención y de función ejecutiva, retrasos cognitivos, aprendizaje disociado, mayor impulsividad y menor capacidad de autocontrol.
OJO: los niños desapegados suelen crear dependencia hacia dispositivos electrónicos, lo que puede derivar en una adicción.


La Dra. Zully Suárez, titular de la Dirección de Salud Integral de la Niñez y la Adolescencia del Ministerio de Salud, enfatiza en la importancia de educar a los chicos en el uso de los aparatos electrónicos, para garantizar su correcto desarrollo físico y psicológico y evitar el desarrollo de hábitos negativos para su salud.

Frente a esta situación, es necesario animarles a realizar actividades al aire libre, que involucren también a otros niños. Sugiere vigilar el uso que le dan a los dispositivos, ya que pueden ser víctimas de la “ciberdependencia”. Al respecto, señala que es necesario garantizar que las aplicaciones y los juegos que utilizan sean adecuados a la edad de cada niño, limitar su uso y evitarlos antes de dormir.

Desde el nacimiento hasta los dos años, el cerebro del niño triplica su tamaño y continúa en ese estado de rápido desarrollo hasta los 21 años. Los estímulos ambientales, o la falta de ellos, son los que determinan el desarrollo del cerebro a esta edad temprana. Se ha demostrado que la estimulación que recibe un cerebro en desarrollo, provocada por la sobreexposición a la tecnología (móviles, internet, iPads, televisión) está asociada con un déficit de atención y de función ejecutiva, retrasos cognitivos, aprendizaje disociado, una mayor impulsividad y una menor capacidad de autocontrol.

La profesional cita a la Academia Americana de Pediatría y la Sociedad Canadiense de Pediatría, que afirman que los niños de hasta dos años no deberían estar expuestos a ningún tipo de tecnología, que los niños de entre tres y cinco deberían tener un acceso restringido de solo una hora al día, y que entre los seis y los 18 años, los niños deberían acceder durante un máximo de dos horas al día.

Según esa misma fuente, el tiempo dedicado a la televisión y a los videojuegos está relacionado con el aumento de la obesidad. Entre los niños que tienen acceso a la tecnología desde su habitación, la obesidad ha aumentado en un 30 %. Estos niños con obesidad desarrollarán diabetes; en un 30%, además, las personas obesas tienen más riesgo de sufrir un derrame cerebral o un ataque al corazón prematuro, lo cual reduce dramáticamente la esperanza de vida

En ese sentido, enfatiza que, a medida que los padres van aumentando su dependencia a la tecnología, se van desprendiendo más de sus hijos. A falta del apego parental, los niños desapegados suelen crear una dependencia hacia los dispositivos electrónicos, lo que puede derivar en una adicción. Uno de cada once niños de entre 8 y 18 años es adicto a la tecnología de acuerdo a un estudio realizado.

Modelo de atención integral de la niñez desde la Atención Primaria en Salud

El Ministerio de Salud Pública, a través de la Dirección de Salud Integral de la Niñez y Adolescencia, impulsa el Modelo de atención integral de la niñez desde la Atención Primaria en Salud (APS), con énfasis en el desarrollo Infantil. Esto implica trabajar con los niños y sus familias en la estimulación oportuna, el cuidado de la nutrición y el buen trato en la crianza para desarrollar sus capacidades lingüísticas, emocionales, sociales y motoras del cerebro.

“Por eso, recomendamos que los padres inviertan su tiempo en interactuar con sus hijos, al hablar, al jugar, al leer cuentos y otras actividades, en lo posible al aire libre”, destaca la Directora de DIRSINA.

Ante esto, refiere que es importante para los niños que en la familia se regule la utilización de la televisión, Tablet, computadora, celular.

Para el uso se debe tener en cuenta:

1. La edad.

2. El tipo de uso.

3. Cuánto tiempo invierte en este tipo de actividad.

Recomendaciones 

Niños menores de 2 años: NO USAR.

“Porque, en esta edad el niño, está en pleno desarrollo y las pantallas no cuentan con condiciones para el desarrollo, y no sustituye la interacción humana fundamental para esta etapa, tonos de voz, atención, emoción, afecto, contacto físico y otro”, afirma la doctora Suárez.

A partir de los 2 años, se podrá proponer una hora diaria de exposición a contenido adecuado para la edad (con un máximo de dos horas diarias) ya que los niños cuentan con otras habilidades en esta etapa. Lógicamente, siempre supervisado por un adulto.

Debe tenerse en cuenta algunos datos importantes, como:

1. Priorizar juegos que sean interactivos, didácticos, acordes a edad.

2. No pantallas ni internet en habitaciones.

3. No exponerlos a pantallas una hora antes de ir a dormir.

4. Compartir con los niños las actividades, no dejarlos solos.

5. Promover actividad física.

6. Promover otro tipo de juegos, y que las pantallas no sean la única actividad disponible para el niño.

7. La utilización de Internet en la época escolar puede ser muy útil para el aprendizaje, siempre y cuando sean acompañados por un adulto.

“Debemos estar atentos a la edad de introducción, al modo de utilización en estas herramientas y que no sea la única actividad diaria. Es importante variar las actividades. La variación estimulará su desarrollo y sus sentidos, y evitará el sedentarismo”, puntualiza la profesional.