Intereses comerciales, factores más importantes de sabotaje a medidas de control del tabaco

Y el papel de la sociedad civil es clave para equilibrar y bloquear ese tipo de interferencia, afirman expertos internacionales.
Discursos falsos de la industria exageran beneficios. “El daño que hace el tabaco es mucho mayor, y no solo en gastos en salud sino en productividad y en medio ambiente”.
“El interés de la industria es totalmente opuesto al de los gobiernos, que es proteger a su población”, destacan.


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El Asesor en Control de Tabaco OPS, Francisco Armada Pérez, miembro de la Misión Técnica que se encuentra en nuestro país para la evaluación de la implementación del Convenio Marco para el Control de Tabaco, refiere que los intereses comerciales, así como los intereses de las empresas afines a productos del tabaco, se han mostrado como uno de los factores más importantes de interferir, sabotear, dilatar y modificar las medidas de control. “Justamente, el Convenio Marco del control del tabaco incluye en uno de sus artículos, específicamente el 5.3, la importancia de velar porque los intereses de la industria no afecten este tipo de políticas”, remarca.

En ese sentido, destaca que uno de los factores que han sido clave para enfrentar, equilibrar y bloquear ese tipo de interferencia es la sociedad civil. “Es uno de los elementos importantes para evidenciar que hay otros intereses interpuestos sobre la promoción de las políticas y, por eso, nosotros estimulamos la participación de la sociedad civil”, agrega Armada. 

Igualmente, agrega que hay otra cantidad de medidas, a nivel legal y reglamentario, que pueden favorecer a una máxima transparencia cuando se interactúa con la industria. “Por ejemplo, que se transparenten todos los datos de la industria y las inversiones que éstas hacen, porque muchas veces las hace a través de medios de comunicación y otras asociaciones que actúan en favor de sus intereses, incluso a nivel de la ciencia. Entonces, es importante que se establezcan medidas que puedan reglamentar este tipo de interacciones y favorecer la transparencia”, acota.

Conflicto de intereses

Armada Pérez pone énfasis además en este aspecto crucial. “Nosotros motivamos las declaraciones de conflictos de intereses. Que todos los trabajadores involucrados en la interacción con la industria o los involucrados en los diseños de políticas en materia de salud declaren que no tienen conflicto de interés en este marco. Hay una serie de recomendaciones, tanto para los gobiernos como de favorecer la participación de la sociedad civil, lo que puede ayudar a contener la interferencia que la industria puede tener sobre las políticas del control del tabaco”, asegura.

Discursos falsos de la industria

María Carmen Audera – López, consultora senior del Secretariado Convenio Marco Control de Tabaco – OMS, por su parte asegura que son sobrevalorados por las industrias los beneficios que aportan para la economía del país. 

“Ellos claramente exageran los beneficios, de cómo eso genera puestos de trabajo, de cómo son un valor para la economía del país, etc. No es cierto, sabemos que el daño que hace el tabaco es mucho mayor, y no solo en gastos en salud sino en productividad, en medio ambiente. De hecho, hay estudios donde se puede ver claramente lo importante que es invertir en el control del tabaco y cómo el país gana sustancialmente dinero. Todos estos discursos de pérdida de empleo, de pérdida económica para el país están demostrados que son falsos. Es claramente un discurso de la industria, el interés de la industria es totalmente opuesto al de los gobiernos, que es proteger a su población. La industria del tabaco quiere aumentar sus ingresos, los gobiernos quieren proteger a su gente”, enfatiza, alentando a distinguir estos intereses.

En ese contexto, recordó la resistencia a los espacios libres de humo, lo que supuestamente generaría pérdidas. “Se discutió mucho en el sector de gastronomía, bares, si prohíben fumar en sus espacios van a perder clientela. También está demostrado claramente que no es verdad, que la gente aprende que no puede fumar dentro de un espacio cerrado y que tiene que ir a la calle para hacerlo. Entonces, todos esos discursos son internacionales, pero tenemos que aprender a diferenciarlos”, añade la consultora internacional.

Cifras tabaquismo en nuestro país

Alrededor de 9 muertes diarias están asociadas al consumo del tabaco, de primera o de segunda mano, lo que corresponde al 12% de las muertes ocurridas en el país por este principal factor de riesgo, unas 3.300 anuales.

Pero una persona que fuma no muere directamente, enferma durante mucho tiempo. Si tiene EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), consulta más de 6 veces al año y se complica. Se estima más de 10 mil consultas por año por esta afección. Además, unas 8 mil consultas al año se registran por problemas cardiovasculares relacionados al tabaco, a los que se suman los cánceres, no son solo de pulmón (con más de 600 muertes al año asociadas al tabaco). 

Si esto se traslada a números económicos, se habla de que el costo de atención, tanto en el sector público como privado, ronda los 1.5 billones de guaraníes. “Eso está cerca de los 300 millones de dólares anualmente, que son nada más los costos directos, sin entrar a medir la baja de productividad, entonces puede duplicarse o triplicarse”, detalla el Dr. Guillermo Sequera, Director General de Vigilancia de la Salud del MSP.