¿Qué acciones ayudan a reducir riesgos de contagio de enfermedades respiratorias?

Usar tapaboca en lugares cerrados y con aglomeración de personas, como transporte público, hospitales, escuelas y otros; ventilar ambientes; lavarse las manos y no compartir utensilios, como bombillas, vasos, cucharas, etc., ayudan a la protección.
Estar vacunados contra influenza y COVID-9 también son claves.


Es importante adherirse a las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública para reducir los riesgos de contraer enfermedades que afectan las vías respiratorias, entre ellas, influenza y COVID-19, que se transmiten vía aérea y por gotas expedidas al toser, hablar, estornudar.

En este sentido, se recomienda: 

Usar tapaboca (cubriendo nariz, boca y mentón)

El tapaboca está diseñado para proteger o “filtrar” gotas o partículas que pueden ingresar al organismo cuando otra persona respira muy cerca, tose o estornuda e, incluso, cuando habla o canta. 

Se debe utilizar en entornos públicos cerrados, como transporte público, comercios, iglesias, escuelas, colegios, universidades y otros. Al aire libre, cuando no se puede mantener la distancia física.

También deben usarlo las personas en servicios de salud, ya sean pacientes, acompañantes o trabajadores del establecimiento. Al igual que cualquier persona que presente síntomas de enfermedad respiratoria. 

Ventilar ambientes 

Contar con una adecuada ventilación contribuye, en gran medida, a reducir la concentración de partículas virales y hay menos probabilidades que sean inhaladas.

Es importante asegurar siempre la intercambiabilidad del aire en ambientes cerrados, mediante la ventilación cruzada; esto se logra con la apertura de puertas y ventanas.

Higienizar las manos 

La práctica del lavado de manos con agua y jabón es una de las medidas principales de protección contra los virus respiratorios. Por ejemplo, esta sencilla práctica ha demostrado ser efectiva en el cuidado de la salud ante COVID-19.

No compartir mate, tereré o utensilios 

Virus como el de la influenza y SARS-CoV-2s se hallan en la saliva, el catarro y en la secreción nasal. Al tomar tereré, mate o alguna bebida, el virus se impregna en los utensilios a través de la saliva; al compartir con otra persona, el virus ingresa por la boca y, de esta manera, se producen contagios. Lo mismo sucede en caso de vasos, cucharas, etc. 

Contar con la vacuna contra influenza y con el esquema completo de COVID-19, según lo recomendado para la edad

La vacuna contra influenza evita principalmente los casos graves y sus complicaciones. Reduce el riesgo de internación y salva vidas. Asimismo, las dosis contra COVID-19 son eficaces e inocuas; para una mayor protección, se debe completar el esquema de vacunación.