Participan alumnos y docentes del Colegio San Francisco Javier y de la Escuela Agrícola.
Con estas actividades se busca ayudar a los estudiantes a aumentar la asistencia escolar y el aprendizaje.
Con sencillos pasos, profesionales pretenden mantener una salud mental adecuada.
Enfocado a estudiantes de
varias instituciones educativas de Presidente Hayes y para fortalecer la
asistencia escolar y colaborar con el aprendizaje, desde el centro de salud de
Benjamín Aceval plantean fórmulas sencillas para tratar temas que muchas veces
son ignorados o simplemente no se les da la importancia debida.
El Lic. Juan Carlos Ibarrola
Villalba inició el ciclo de charlas en el Colegio San Francisco Javier y la
Escuela Agrícola abordando temas como “autoestima y la buena conveniencia y
procrastinación”, con una duración aproximada de 20 minutos por tema, y
la participación de unos 150 alumnos y 12 docentes.
Con mucha frecuencia las
experiencias capaces de reforzar la autoestima están relacionadas con el
colegio, y por ello producen una ansiedad con la que el niño o adolescente lucha
continuamente; la carencia de autoestima le lleva a obtener malas notas y éstas
le inducen a considerarse todavía menos, a tener menos estimación por sí mismo.
De esta forma, el adolescente entra en un círculo vicioso del que le resulta
cada vez más difícil salir.
Cuando aumenta la
autoestima, la ansiedad disminuye y ello permite que el adolescente participe
en las tareas de aprendizaje con mayor motivación.
En cuanto a la
procrastinación o postergación, se define como la acción o hábito de postergar
actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras
situaciones más irrelevantes o agradables. Esto interfiere de forma
significativa en la vida y afecta al bienestar emocional, personal, laboral o
social.
Para mantener una salud
mental adecuada y vencer la procrastinacion, profesionales recomiendan;
1. Reconocer que se está procrastinando y en qué ámbitos de la
vida se realiza esta acción.
2. Entender por qué se procrastina, y en qué caso concreto.
3. Pasar por alto el
hecho de ser procrastinadores.
4. Mejorar la autoestima y autoconcepto. Esto puede llevar a
percibir más autocontrol sobre la vida, o lo que es lo mismo confiar en poder
hacer lo que se proponga.
5. Dividir las tareas complejas en otras más sencillas. Esto
hace percibir que no se enfrenta a un muro insalvable sino a peldaños de una
escalera. Y si se presentan dificultades,
pida ayuda, no se pare.
6. Ante la falta de organización en la vida, pare y
diferencie lo urgente, de lo importante
y de lo que puede esperar.
7. Entrénese en hacer cosas, cosas que le cuestan, propóngaselo
como un reto.
8. Haga un listado de lo que se pospone y vaya abordando una
de estas tareas cada día, tolerando el displacer y lo más importante,
premiándote por ello.
