Rinitis alérgica: Cuidados y medidas de prevención contra la enfermedad

Ante la aparición de los primeros síntomas, se debe consultar inmediatamente al médico para conocer qué tratamiento médico se debe llevar a cabo. Se recomienda no utilizar las gotas nasales descongestionantes debido a su efecto rebote.

La rinitis alérgica, es un cuadro de inflamación de las mucosas de la cavidad nasal, causada por una reacción exagerada del sistema inmune a los alérgenos del aire. Éstos, pueden entrar en contacto con nuestro cuerpo a través de la inhalación del polen, humo, productos químicos, polvo, ingestión de comidas, medicamentos, contacto de la piel con sustancias químicas como perfumes, cremas y la inoculación de la piel mediante la picadura de insectos.

Los síntomas principales son los estornudos, secreción nasal, congestión nasal, ojos llorosos, picazón en los ojos, nariz y paladar, dolor de garganta, ronquidos, tos y disminución del paladar y del olfato. Las personas con otras enfermedades alérgicas como el asma, conjuntivitis alérgica y otros presentan un mayor riesgo de padecer esta enfermedad.

Para la rinitis alérgica, no siempre es sencillo rehuir el foco de riesgo, teniendo en cuenta que la persona alérgica lo suele ser a varias sustancias a la vez, por lo cual la acción terapéutica muchas veces debe sustentarse en el empleo de medicamentos. Los más conocidos y utilizados bajo la orientación del médico tratante son los antihistamínicos de segunda generación y el uso de corticoides para tratamientos prolongados.

En cambio, las gotas nasales o los aerosoles descongestionantes de venta libre no deberían ser utilizados durante más de unos pocos días cada vez, porque recurrir a ellos continuamente durante una semana o más puede producir un efecto rebote que puede empeorar la situación del paciente.

Asimismo, el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social recomienda tomar algunas medidas preventivas contra la enfermedad:

-Cubrirse la boca con un pañuelo o con el interior del codo al toser o estornudar.

-Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, principalmente después de limpiarse la nariz, antes de ingerir alimentos y al ingresar a la casa. El uso de alcohol en gel es una alternativa para la higiene de las manos.

-Utilizar siempre pañuelos descartables.

-Evitar concurrir a lugares de hacinamiento.

-En el caso de padecer algunos síntomas, consultar con un médico para conocer el tratamiento adecuado que deba llevarse a cabo.