Si vas a toser o estornudar cubrite con el brazo, nunca con la mano

Esto evitará que el virus gripal se expanda.
Si estás con fiebre, tos, dolor de garganta, congestión nasal, consultá al médico.
Ante estos síntomas, el Ministerio recomienda evitar pasar la mano, dar beso, compartir mate o tereré, ya que son vías que facilitan la propagación de la enfermedad.
No acudas a actividades de concentración masiva, para evitar que otros se enfermen, ni te automediques, puede complicar tu cuadro.


El virus responsable de la gripe o influenza se transmite con facilidad de una persona a otra a través de gotitas y pequeñas partículas expulsadas con la tos o los estornudos. Igualmente el virus puede propagarse mediante objetos contaminados con fluidos del enfermo.

Esta infección afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y ocasionalmente, los pulmones. La gripe dura generalmente una semana y se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta, dolores musculares, dolor de cabeza y malestar general importante, tos seca, dolor de garganta y rinitis.

En caso de contar con síntomas de la enfermedad, se recomienda:

Acudir al médico y no automedicarse, pues podría generar una complicación del cuadro.

Al toser o estornudar cubrirse con la flexura del brazo, NUNCA CON LA MANO, para no dispersar el virus.

Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, sobre todo luego de entrar en contacto con secreciones nasales, antes de comer y preparar alimentos, y después de ir al baño. En caso de no tener agua, utilizar alcohol en gel.

Evitar el contacto físico estrecho con personas con síntomas respiratorios (estornudo y/o tos).

Limitarse a pasar la mano, no dar beso ni compartir cubiertos, maté o tereré, para impedir la propagación del virus por estas vías.

En lo posible, no acudir a lugares de alta concentración de personas (shopping, estadios, supermercados, etc.), a fin de evitar que otros se enfermen.

A tener en cuenta:

Una persona con gripe se recupera en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico, pero esto aumenta la probabilidad de contagiar a otros. 

En niños pequeños, personas de edad avanzada y personas que sufren otras afecciones médicas graves esta infección puede conllevar complicaciones de la enfermedad de base, provocando cuadros de neumonía o incluso causar la muerte, por lo que en estos grupos vulnerables es fundamental la vacunación con la dosis antiinfluenza.