25 de noviembre. Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

  • La violencia contra la mujer constituye una grave violación de los derechos humanos y un problema de salud pública. El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social sigue con el trabajo de fortalecer la detección oportuna, la atención integral y el seguimiento continuo de las víctimas, así como la articulación interinstitucional necesaria para garantizar una respuesta efectiva y coordinada frente a todas las formas de violencia contra la mujer.


En Paraguay, los datos recientes muestran la magnitud del reto: el Instituto Nacional de Estadística reportó que el 78,5 % de las mujeres de 18 años o más han sufrido al menos una vez alguna forma de violencia en su vida. De estas, el 57,8 % ha experimentado violencia psicológica, el 25,7 % violencia física, el 60,9 % violencia sexual y el 25,0 % violencia económica. Se constata que entre los hechos de violencia más frecuentes contra las mujeres entre 2020-2024, la violencia familiar ocupa el primer lugar con un total de 160.287 denuncias ingresadas al Ministerio Público, según la plataforma de datos abiertos.

El Ministerio de Salud Pública cuenta en su estructura institucional con el Programa Nacional para la Prevención y Atención Integral de Mujeres, Niñas, Niños y Adolescentes en Situación de Violencia, responsable de la conducción técnica normativa en materia de violencia, dependiente de la Dirección General de Programas de Salud. Esta instancia coordina acciones de prevención, capacitación del personal de salud, elaboración de instrumentos técnicos y fortalecimiento del modelo de atención integral.

Manual de Atención Integral a Víctimas de Violencia Intrafamiliar y Basada en Género en el Sistema de Salud. Esta normativa, de aplicación obligatoria en todo el Sistema Nacional de Salud, rige el actuar profesional en los servicios de salud ante casos de violencia y cuenta con instrumentos estandarizados:

Formularios oficiales de Registro y Atención para víctimas de violencia, que constituyen parte de la historia clínica y son esenciales para los procesos asistenciales y judiciales. Así como la cadena de custodia y consentimiento informado.

Flujograma de Atención Integral. Orienta la intervención desde una perspectiva biopsicosocial, asegurando detección oportuna, atención integral, notificación inmediata a autoridades competentes, seguimiento y articulación intersectorial

El flujograma describe paso a paso cómo debe actuar el personal de salud ante la detección de un caso para brindar la atención integral, incluyendo riesgos inmediatos:

· Atención médica, psicológica, de trabajo social y legal.

· Anticoncepción de emergencia, detección/profilaxis para ITS/VIH, toma de muestra y preservación de las pruebas para fines asistenciales y legales (en violencia sexual).

· Notificación y derivación. Comunicación a los organismos competentes de protección y justicia, y referencia a otros servicios internos o externos según necesidad.

· Manejo de evidencia y cadena de custodia. Documentación y preservación de pruebas para fines asistenciales y legales.

· Seguimiento médico, psicológico, social y legal.

El Ministerio de Salud Pública enfatiza que la prevención, atención integral, seguimiento, protección y acceso a justicia son responsabilidades compartidas entre el Estado, instituciones públicas y privadas, organismos de protección y sociedad civil. Solo mediante una respuesta articulada y efectiva es posible enfrentar y erradicar esta problemática.

Ante situaciones de violencia, se insta a realizar la denuncia y a acudir al servicio de salud más cercano para recibir atención integral y oportuna. El personal sanitario actuará con confidencialidad, respeto, enfoque de derechos humanos, asegurando que cada intervención priorice la seguridad y el bienestar de la persona en situación de violencia.